Recorrido por el centro de la ciudad de Harstad, Noruega
Al día siguiente, uno de los pendientes, era hacer un recorrido caminando por toda la zona, para ubicar físicamente los sitios desde los cuales podría observar bien las auroras boreales. Así que con ayuda del teléfono móvil y sus aplicaciones de mapas, me puse a ubicarlos, así como descubrir poco a poco los sitios de interés.
Para estos días, cabe aclarar que de las 24 horas que tiene el día, únicamente 3 había luz solar. El resto, algunas horas como el amanecer o atardecer y el resto oscuro como la noche. La temperatura rondando los 3°C. con sensación térmica de quizás 1°C.
Algo que fue necesario estar revisando con mucha frecuencia durante mi estancia ahí, fueron 2 cosas: el pronóstico del clima y el pronóstico de las auroras boreales.
Las auroras boreales son visibles en la zona en cierto momento durante el día. La aurora boreal es un fenómeno, como he explicado en blog anterior, donde las tormentas solares electromagnéticas, generan un efecto luminoso en la atmósfera.
Es mas o menos circular o de forma oval, y gira alrededor del polo magnético de la tierra. Mientras mayor es su intensidad, más visible será.
Entonces, con ayuda de las apps, podía saber en qué horario del día podían ser visibles, para que, aunado al clima, cielo despejado, se pudiera llevar a cabo la observación del fenómeno.
A pesar de que casi todo el día está oscuro, sólo entre las 18:00 y 6:00 son visibles.
Ya con la ubicación de los sitios de observación, tenía pendiente aún reunirme con mi sobrina Ana Cristina. Ella, al terminar sus compromisos escolares, me fue a ver al hotel. Ahí mismo, nos saludamos efusivamente después de un buen tiempo. Justo semanas antes de su venida a esta ciudad, nuestra familia vivió un período de crisis, por la salud de mi madre.
Mis hermanas y yo, nos dedicamos a atender lo mejor posible a ella, que veíamos que cada vez más se complicaba su cuadro clínico. Y desde esas fechas, ya no teníamos contacto mis sobrinos y sobrinas conmigo.
Días después mi señora madre falleció cuando ella ya estaba rumbo a esta ciudad.
Le entregué todo lo que le llevaba de encargo. Lo más “valioso” para ella, eran una bolsas de botanas enchiladas, papas y frituras, mismas que consumía en Mérida y que extrañaba aquí. Se puso muy contenta al recibir sus bolsas de “aire”, jajajajaja.
Lo siguiente fue pedirle que me llevara a las oficinas de Telia, una compañía de telefonía celular con buena cobertura en la zona. Para ello, utilizaríamos el servicio de transporte urbano de la ciudad.
Para lo anterior, para minimizar costos, era necesario adquirir un boleto virtual por un plazo determinado. Esto se hace mediante una app del teléfono móvil del Transporte.
Descargué la aplicación y seguí las instrucciones que me dio mi sobrina, para registrar los datos de mi tajeta de crédito y adquirir así un pase virtual para los próximos 7 días.
Al activarlo, en la pantalla de la app se muestra la vigencia, misma que le tienes que mostrar al operador del autobús para ingresar al mismo.
Una vez en la plaza comercial, inmediatamente fuimos a la oficina telefónica y pedí información de los planes disponibles de prepago.
Hay que aclarar, que ahí el segundo idioma más usado es el inglés. Así que en ese idioma hice la contratación del servicio, que durante todo un mes, me permitiría usar datos móviles hasta por 10gb.
Suficiente para los planes que tenía para efectuar algunas transmisiones en vivo de vídeo a través de YouTube o Facebook Live. Así que, por el equivalente a MX$ 1,200 en “Krones”, tuve esa capacidad de transmisión y comunicación. Y no sólo eso, sino que me serviría también para todo mi viaje, a través del roaming, que incluía también destinos como Londres, Reino Unido y Düsseldorf, Alemania.
Sin lugar a dudas fue la mejor inversión, si se pretende usar de forma intensiva la comunicación celular. Para eso, me hice de un número de celular local y lo activé en un segundo teléfono móvil que llevaba: mi anterior iPhone 6.
Ya con lo anterior, ya tenía cubierto el medio de transporte, y la telefonía, que de otra forma, hubiera sido muy costoso.
Mientras se terminaba el proceso de validación, pues tenían que hacer sus validaciones de mis datos, invité a mi sobrina a probar un brownie y empanada de un restaurante de ahí mismo. Una vez más, por esa pequeña compra, el pago fue con tarjeta de crédito.
Una vez teniendo el segundo teléfono activado, procedí a mantener el teléfono con la línea telefónica de México en modo avión, para que dejara de usar el roaming y datos de Telcel, y comuniqué a los familiares del nuevo número celular temporal.
Regresamos al hotel y mi sobrina recogió las cosas que le había llevado y nos fuimos a la estación del bus, hasta el paradero donde abordaría el bus que la llevaría rumbo a su casa, con su familia noruega.
Retorné a mi habitación, y a verificar todo el equipo fotográfico y de vídeo, que siempre me acompañaría, que estuviera debidamente cargadas sus baterías, así como los bancos de energía para los teléfonos celulares y otros accesorios.
Posteriormente salí nuevamente a la zona de los muelles, para empezar a hacer pruebas y empezar a configurar de forma manual la cámara fotográfica. Según los pronósticos, era posible ver las auroras.
No era novedad para mí, que el fenómeno de las auroras boreales, cuando están débiles, no son visibles a simple vista.
Tienen que tener una intensidad mayor, para que empiece a ser visible por el ojo humano a simple vista en todo su esplendor.
Como no tenía experiencia personal alguna, procedí a hacer pruebas fotografías a cielo abierto, configurando larga exposición de 5 segundos.
Y efectivamente: ahí estaban las auroras, en su color verde esmeralda característico, pero no visible así para el ojo humano. Me fijé bien, tratando de ver como se ven a simple vista, encontrando que sí se ven, débilmente, pero de color gris, en medio del cielo negro.
Lo característico, es su movimiento particular. No es como una nube, que el viento empuja de un lado a otro. Es un movimiento que permite cambiar de forma con rapidez.
Por momentos se intensifica y debilita, a simple vista, todo en tonos grises oscuros. Pero ante el lente de la cámara, con larga exposición, logra captar perfectamente el color verde intenso.
Procedí a obtener fotografías secuenciales, procedimiento fotográfico denominado “timelapse”, el cual, al hacer fotografías cada cierto tiempo, y luego se incorporan en una aplicación de edición de vídeo, se obtiene una película animada de la aurora boreal.
Continuará…